Blog gratis
Reportar
Editar
¡Crea tu blog!
Compartir
¡Sorpréndeme!
NTMC - (No Tires Más Centros)
Blog de Roberto Toro
07 de Noviembre, 2010 · General

Perdedores Hermosos

Roberto Toro fue un antiguo centro half, de aquellos que jamás escucharon hablar de cuevas ni tantos otros embrujos con que el mercado ha adornado a este juego perfecto. Aseguraba haber jugado algún tiempo en la academia, aunque jamás pude comprobar esa afirmación. Más creíble puede haber sido su participación en las filas del viejo Oeste Juniors de Comodoro Rivadavia, cuando el viento y el carbón de las minas le adornaban su clara visión de un juego que el miedo y el embuste intentan reformular a favor de un negocio cada vez más evidente y aburrido.

Los fríos caminos de tierra lo trajeron a Trelew. El barrio no ofrecía alternativas, y la vieja cancha de tamariscos alternaba en su corazón junto a aquellos pocos tablones de Boyacá y Juan Agustín García, en donde tiempo después despuntaría un tal Diego Maradona.

Lo conocí hace algún tiempo atrás casi por casualidad. En días en que el alma deseaba ser Roberto Arlt, entrevistaba a cuanto Cristo se me cruzara con ganas de compartir el tema de turno en la voluntad del interrogado. Entre papeles viejos vieron luz retazos de esa charla. Aquí alguno de esos momentos.

                                      

-Anoche me quedé pensando en eso de que el miedo se comió el encanto.

Usted me pondrá las razones que quiera, las excusas… pero el fútbol está sobredimensionado. No digo que esté mal, sólo que por la gente equivocada. Si para usted el fútbol es cuestión de vida o muerte, no va a tardar en llegar el día en que le entre el miedo de que le metan un gol. Eso no sería nada, pero si, ahora, ese gol le arruina el negocio que tiene montado, más bien que primero se va a cuidar el culo, después me va a llenar de obstáculos el acceso y, si nos queda tiempo, le metemos un centro frontal a Dios, que tal vez la peina y empatamos.

 

-Y…, yo le entiendo, pero si el fútbol hubiera cambiado de paradigma, ¿no sería lícito adecuarse al momento?

De que adecuación me habla usted, si de los dos cincos que me puso no hacemos uno. Primero intente que se la pasen correctamente a más de un metro de distancia, después que puedan pararla sin usar la canillera… Se corre mucho, los jugadores se llenan de músculos, físicos trabajados; es una pena que no exista una máquina que ejercite las ideas.

 

-¿Usted cree negativa la relación entre el jugador y el atleta, la sobredimensión del músculo, la fuerza y la velocidad, casi confundida con la urgencia y la torpeza?

 

Es difícil emitir una opinión tan determinante sin parecerse al comentario de  una vieja de almacén, pero hay una urgencia  en todo, una sobreestimación de la inmediatez que asusta. Pero lo entiendo. Hay cada vez menos tiempo para todo, muchas más horas por trabajar, las cosas deben suceder rápido, el auto debe andar más ligero, las noticias cada vez más directas, las horas parecen andar más rápidas, el puntero izquierdo también, no sé para qué pero el va. El tema es que cuando se la damos se hace una galleta con el futbol que dan ganas de dejarlo así nomás, al galope, e inscribirlo en las cuadreras.

 

-¿La ironía no será una chance para sobrevalorar la lentitud de otro tiempo?

Ninguna lentitud, la pausa. Usted lo veía a Bochini, y parecía que el mundo se ordenaba drásticamente en una cancha. Ahí tiene usted hordas de estos atletas que les llaman, corriendo torpemente para todos lados, llevando la pelota durante una insoportable cantidad de metros, en una actitud más parecida a la amenaza que a la habilidad. En vez de correr como un atolondrado, intente pasársela a un compañero y ofrecerse nuevamente. Seguramente llegue más rápido al mismo lugar con un poco menos de cansancio y algo más de alegría que la de un fulano que va topando rivales como un percherón.

 

-Coincido con usted en que hay alternativas y complementos del juego que parecen haberse transformado en la quintaescencia del juego, aun atentando contra él. Ya las hemos nombrado: la velocidad es una, la fuerza es otra.

Es que el hincapié que se pone en la velocidad se hace en momentos equivocados. Usted tiene un central que quiere llegar urgente al área rival y entonces agarra y le mete un viandazo y en tres segundos tiene la pelota volando cerca del área rival, aunque en menos de dos ya la tiene de nuevo encima, porque el otro central, de frente al juego, la devolvió con la misma urgencia. Noventa minutos así. Después viene uno de esos muchachos que terminan el partido con más barro que pases hechos a un compañero y tarda tres movimientos en para una pelota. Y me dicen que ese fútbol es veloz.

 

-En esto de la exageración, está, también, la exasperante exaltación del éxito. El ganar como sea para poder ser algo y hasta dónde es una excusa legítima la victoria para llevar adelante determinados planes.

El otro día vi un partido en donde uno de los dos equipos no cruzó la mitad de la cancha más que en despejes fortuitos. Es decir: abandonó, desde el inicio del partido, la voluntad de atacar. Es más, ni siquiera tuvo tiempo de abandonarla, porque nunca le interesó atacar.  Le cedió al rival todo intento de juego y se dedicó a esperar con nueve jugadores decididamente en posición defensiva. Si usted veía la anatomía de esos jugadores, estaba más que claro a qué se dedicaba esa cuadrilla, y si viera al técnico… un sinvergüenza. El asunto es que yo me preguntaba, para qué entran a una cancha si no van a intentar si quiera conocer el área rival. Hasta dónde es posible perder de vista el fin último del juego, el más digno papel: la voluntad de jugar, de atacar, de proponer, de crear, se superar al rival. Pero hay un drama mayor que no está en el partido que pronto se termina y mañana empieza otro nuevo, sino en que existe un medio, un contexto que guía el destino de la información que legitimiza este tipo de cretinadas y vilezas con el pretexto del éxito.

 

-Sin querer pasarme al extremo del derrotado, alguien dijo algo así como “la derrota tiene una dignidad de la que la victoria carece”

Es que si el éxito comprende ese tipo de actitudes, déjeme del lado de los que pierden. De lo contrario se corre el riesgo de crear héroes de barro, sociedades de cartón. En una de esas, pudiese ser más peligroso de lo que pensamos. Pero, claro, uno dice esto y parece que está cometiendo una injuria ante alguien que ha ganado mucho y ante eso debe callarse. Como si para poder hablar uno tuviese que pelar pergaminos de victorias. El que no gana no sirve. Pero si usted gana porque masacro al rival o porque se metió en alguna componenda con los dueños del circo, ¿qué tanto ganó?

 

-Parece ser que disfruta mucho de esa especie de antihéroes. De esos personajes con que se amueblan los universos paralelos: los perdedores.

… los Paraísos Perdidos, que son los únicos que merecen la pena ser buscados. Cuando el hombre arranque ese significado de la historia y lo haga suyo, algo bueno sucederá, aun en las peores.

 

Debo decir que hace mucho tiempo de esta charla,  quién sabe a dónde habrá ido con su vida. Tantas preguntas que el tiempo me ha dado, tantas historias para desandar entre mate cocido, de ese que se toma con bombilla y se cuela paciente entre yerba y algodón.

 En una de aquellas charlas dijo, como al pasar, una frase que sólo ahora logro rescatar: “Como el amor o el arte, el fútbol resulta fácil o imposible.”

Palabras claves ,
publicado por robertotoro a las 19:47 · Sin comentarios  ·  Recomendar
 
Más sobre este tema ·  Participar
Comentarios (0) ·  Enviar comentario
Enviar comentario

Nombre:

E-Mail (no será publicado):

Sitio Web (opcional):

Recordar mis datos.
Escriba el código que visualiza en la imagen Escriba el código [Regenerar]:
Formato de texto permitido: <b>Negrita</b>, <i>Cursiva</i>, <u>Subrayado</u>,
<li>· Lista</li>
Sobre mí
FOTO

Roberto Toro

Fútbol, música, libros.

» Ver perfil

Calendario
Ver mes anterior Abril 2024 Ver mes siguiente
DOLUMAMIJUVISA
123456
78910111213
14151617181920
21222324252627
282930
Buscador
Blog   Web
Tópicos
» General (10)
Nube de tags  [?]
Secciones
» Inicio
Enlaces
Más leídos
» El hombre y su producto
» Perdedores Hermosos
» Jugadores (I)
» Diferentes Maneras
» Los límites de Adriano
» Equipos (I)
» Mes que un club
» El Rey de Copas y el orgullo perdido
» El tan mentado oficio de vender humo
» Golpe de Estado
Se comenta...
» Golpe de Estado
1 Comentario: Jane
» El hombre y su producto
2 Comentarios: Carlos fabian leeb, Carlos fabian leeb
» Mes que un club
2 Comentarios: Roberto Toro, carlos fabian leeb
FULLServices Network | Blog gratis | Privacidad